Valencia: profesores de religión cobran el sueldo íntegro por una jornada de 13 horas

Nos llega esta denuncia. Si alguien tiene más información agradeceríamos que nos la facilitara.

FUENTE: http://yometiroalmonte.com/Articulo.aspx?id=126

En la tierra del Gran Ladrillazo y la corrupción desenfrenada, los recortes en educación obligan a los alumnos a recibir clases en barracones o centros sin calefacción.

 Pero un reducido número de elegidos por el obispado disfruta de los privilegios establecidos por un convenio que dice: «Se formalizarán contratos a jornada completa (sueldo completo de profesor) a partir de 18 horas en primaria y 13 horas en secundaria a la semana. Capítulo II vacaciones retribuidas». PDF: www.apprece-cv.es/descargar.php?id=24 

Cabe señalar que los barracones están establecidos como definitivos, algunos desde hace 20 años. Como suele suceder, primero se toman medidas «de urgencia» para luego olvidarlas (siempre a favor de los mismos). Algunos datos:

– 1.400 colegios públicos e institutos.

–  Un Decreto Ley que «ajustaba» salarios y plantillas: incremento del número de alumnos por aula en un 20% (de 35 a 42 en bachillerato; de 25 a 30 en infantil y primaria y de 30 a 36 en la ESO).

–  Más horas de clase que debe impartir cada profesor: de 18 a 20 horas en la enseñanza secundaria y un mínimo de 25 en educación primaria e infantil.

–  Menos plantilla: recorte de 1.200 profesores interinos. En los últimos tres años, según fuentes sindicales, 4.500 docentes han sido despedidos.

– Menos becas para libros de texto, aumento del IVA del 4 al 21% en el material escolar (añadido a la reducción salarial de las familias), e inexistencia de una red gratuita de centros educativos infantiles.

 800 barracones o aulas prefabricadas acogerán a entre 16.000 y 18.000 alumnos principalmente en los tramos de infantil y primaria. Muchas de estas aulas no tienen carácter provisional (mientras se construye un nuevo colegio): algunos barracones llevan funcionando cinco años, otros 20.

Para que luego diga Rouco que «la crisis se veía venir, los pecados se pagan«.

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